Os presento a Troy, un podenquito de dos mesecitos, y su historia aparte de estremecedora es alarmante.
Un cazador con su escopeta colgada al hombro, arma de matar, le dice a una familia que si quieren al cachorro. Extrañados, les contesta que por qué, les dice que no le quiere y que si no le cogen que no pasa nada, que el monte lo tiene enfrente, le pega un tiro y resuelve el problema.
Asustados de ver que iba en serio lo cogen enseguida y el cazador les contesta:
Asustados de ver que iba en serio lo cogen enseguida y el cazador les contesta:
GRACIAS, ME HAN AHORRADO UN CARTUCHO.
No le han ahorrado quitar una vida, "le han ahorrado un cartucho"
Dios mío, qué poco vale la vida.
Dios mío, qué poco vale la vida.
Esto ha ocurrido de verdad.
Troy está en esa casa de acogida y en pocos días vuela rumbo a Holanda donde su vida vale más que todos los cartuchos del mundo juntos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.