Ubuntu llevaba varios días vagando por un pueblo cerca de Valencia. Finalmente, la madrugada del domingo al lunes, pudo ser rescatado por Jose y Jonatan, que al ver en las lamentables condiciones que se encontraba se pusieron en contacto con los compañeros de la delegación Valencia solicitando ayuda. Ubuntu estaba en el límite de sus fuerzas. Esta misma madrugada Ubuntu fue trasladado a casa de uno de nuestros voluntarios para valorar su estado y desinfectarlo de los cientos de pulgas y garrapatas que tenía en su cuerpo. A simple vista se podía apreciar con la crueldad que había sido tratado y que su estado era grave. Ubuntu apenas se sostenía en pie, presentaba un estado de desnutrición extrema (solo pesa 7kg cuando su peso ideal serán unos 13kg). Tanto las mucosas de los ojos como las encías estaban completamente pálidas y la sarna se había extendido por todo su cuerpo, afectándole de forma muy severa la zona de las orejas. Su estado emocional no era nada bueno tampoco, evidentemente Ubuntu tenía pánico a los humanos.
A las 10:00 de la mañana del lunes Ubuntu fue ingresado en la Clínica Veterinaria El Pinar para valorar su estado e iniciar su recuperación La analítica confirmó nuestras sospechas, Ubuntu tenía el hematocrito y las plaquetas en niveles muy bajos y necesitaba una transfusión de sangre urgente. Marla, una de nuestras galgas en acogida, fue la generosa donante y esta misma mañana le realizamos la transfusión. Además, la analítica dio positivo en leishmania, rickettsia y anaplasma platys. Ubuntu se quedo ingresado para recibir la medicación necesaria por gotero y estar bajo control veterinario. Lo que Ubuntu nunca perdió es el apetito, devoraba toda la comida que los veterinarios le iban suministrando. Literalmente, cuando le recogieron de la calle, se estaba muriendo de hambre. A las pocas horas de la transfusión se le hizo un hemograma de control para comprobar si su cuerpo había aceptado la nueva sangre, afortunadamente su hematocrito había subido considerablemente situándose fuera de la zona de peligro. Por otra parte, la medicación suministrada, la buena alimentación y el cariño de todo el equipo veterinario le dieron un empujoncito a Ubuntu y, ayer martes, aunque seguía estando muy débil, su estado mejoro notablemente. También mejoro su estado emocional, su nivel de estrés y pánico bajaron considerablemente, y ya sentía cómodo ante la presencia de del equipo veterinario y estaba relajado al recibir los tratamientos y caricias. Así que ayer por la tarde pudimos trasladar a Ubuntu a su casa de acogida, donde le espera un largo camino en su recuperación, tendremos que ir viendo la evolución de sus enfermedades y su piel, pero a su lado nos tendrá para ayudarle en lo que necesite. Lo que también necesitará Ubuntu dentro de unos meses, igual que los miles de podencos que son maltratados y abandonados todos los años en España, es una familia donde se sienta querido y respetado. Los podencos son unos inigualables compañeros para vivir en familia, con un historial de maltrato y abandono muy cruel, y hay muchos podencos esperando la oportunidad de una vida digna, adopta un podenco!
A las 10:00 de la mañana del lunes Ubuntu fue ingresado en la Clínica Veterinaria El Pinar para valorar su estado e iniciar su recuperación La analítica confirmó nuestras sospechas, Ubuntu tenía el hematocrito y las plaquetas en niveles muy bajos y necesitaba una transfusión de sangre urgente. Marla, una de nuestras galgas en acogida, fue la generosa donante y esta misma mañana le realizamos la transfusión. Además, la analítica dio positivo en leishmania, rickettsia y anaplasma platys. Ubuntu se quedo ingresado para recibir la medicación necesaria por gotero y estar bajo control veterinario. Lo que Ubuntu nunca perdió es el apetito, devoraba toda la comida que los veterinarios le iban suministrando. Literalmente, cuando le recogieron de la calle, se estaba muriendo de hambre. A las pocas horas de la transfusión se le hizo un hemograma de control para comprobar si su cuerpo había aceptado la nueva sangre, afortunadamente su hematocrito había subido considerablemente situándose fuera de la zona de peligro. Por otra parte, la medicación suministrada, la buena alimentación y el cariño de todo el equipo veterinario le dieron un empujoncito a Ubuntu y, ayer martes, aunque seguía estando muy débil, su estado mejoro notablemente. También mejoro su estado emocional, su nivel de estrés y pánico bajaron considerablemente, y ya sentía cómodo ante la presencia de del equipo veterinario y estaba relajado al recibir los tratamientos y caricias. Así que ayer por la tarde pudimos trasladar a Ubuntu a su casa de acogida, donde le espera un largo camino en su recuperación, tendremos que ir viendo la evolución de sus enfermedades y su piel, pero a su lado nos tendrá para ayudarle en lo que necesite. Lo que también necesitará Ubuntu dentro de unos meses, igual que los miles de podencos que son maltratados y abandonados todos los años en España, es una familia donde se sienta querido y respetado. Los podencos son unos inigualables compañeros para vivir en familia, con un historial de maltrato y abandono muy cruel, y hay muchos podencos esperando la oportunidad de una vida digna, adopta un podenco!
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