Ayer por la.tarde Manoli descubrió a Basic dentro de una balsa de unos 8 metros de profundidad. Pensamos que el galgo, por la sed, bajo a beber y no pudo volver a subir.
Después de conseguir formar un equipo junto a agentes de la Guardia Civil y tras varias horas, Manoli y los demás pudieron sacar a Basic, que estaba exhausto, pero que esta noche ya ha descansado a salvo.
Lamentablemente otro perro no tuvo la misma suerte y cuando llegaron ya estaba muerto en la balsa. Según hemos sabido, Basic llevaba varios días en la balsa.
Por si fuera poco, uno de los voluntarios del equipo de Manoli, después de rescatar a Basic, la llevó a un agujero en el que había tres pequeñas galgas de unos dos meses, así que Manoli regresó a casa con cuatro acompañantes.
Pronto los cuatro estarán disponibles para adopción, mientras, no podemos hacer más que dar las gracias a la gente que como Manoli y su marido Màrius, siempre están a punto para ayudar a los más necesitados, abriendo siempre las puertas de su hogar, en el que desde hace pocos meses vive además Antonio, su hijo, para hacer las primeras curas, cubrir las primeras atenciones y dar los primeros mimos, sin importar el estado en que llegan los recién rescatados. Todas estas personas son imprescindibles.
La historia de Basic y el otro perro que no se pudo salvar nos recuerda la dureza con que viven los animales abandonados el verano y el calor. Si hubieran tenido acceso a agua, ni Basic ni el otro perro habrían bajado a la balsa. Ir llenando un cubo con agua fresca no cuesta nada y salva vidas. Tengamos todos este pequeño gesto hacia los más necesitados y ayudemos a que vivan un poco mejor.
Después de conseguir formar un equipo junto a agentes de la Guardia Civil y tras varias horas, Manoli y los demás pudieron sacar a Basic, que estaba exhausto, pero que esta noche ya ha descansado a salvo.
Lamentablemente otro perro no tuvo la misma suerte y cuando llegaron ya estaba muerto en la balsa. Según hemos sabido, Basic llevaba varios días en la balsa.
Por si fuera poco, uno de los voluntarios del equipo de Manoli, después de rescatar a Basic, la llevó a un agujero en el que había tres pequeñas galgas de unos dos meses, así que Manoli regresó a casa con cuatro acompañantes.
Pronto los cuatro estarán disponibles para adopción, mientras, no podemos hacer más que dar las gracias a la gente que como Manoli y su marido Màrius, siempre están a punto para ayudar a los más necesitados, abriendo siempre las puertas de su hogar, en el que desde hace pocos meses vive además Antonio, su hijo, para hacer las primeras curas, cubrir las primeras atenciones y dar los primeros mimos, sin importar el estado en que llegan los recién rescatados. Todas estas personas son imprescindibles.
La historia de Basic y el otro perro que no se pudo salvar nos recuerda la dureza con que viven los animales abandonados el verano y el calor. Si hubieran tenido acceso a agua, ni Basic ni el otro perro habrían bajado a la balsa. Ir llenando un cubo con agua fresca no cuesta nada y salva vidas. Tengamos todos este pequeño gesto hacia los más necesitados y ayudemos a que vivan un poco mejor.
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